El Despacho Gómez González Abogados (DABOGADOS), en Madrid, resalta la importancia de cumplir con el Reglamento Europeo de Protección de Datos y La Ley Orgánica de Protección de Datos por parte de las empresas, pymes, además de los autónomos, para evitar el desprestigio y deterioro de la imagen profesional, así como evitar las sanciones que la Agencia Española de Protección de Datos pueda aplicar cuando se comete una infracción.
Beneficios y objetivo de la Normativa de Protección de Datos
La importancia de cumplir con el Derecho a la Protección de Datos la Ley de Protección de Datos radica en garantizar y proteger, en lo que concierne al tratamiento de datos personales, las libertades públicas y los derechos fundamentales de las personas físicas, y especialmente de su honor e intimidas personal y familiar.
Cumpliendo con la Protección de Datos, además de evitar la aplicación de sanciones por infracciones, mejora la reputación corporativa, empresarial y profesional ante los clientes y potenciales clientes. Los usuarios y consumidores valoran de forma muy positiva que los empresarios respetan su privacidad e intimidad.
Cuando se comete una infracción del RGPD y la LOPDGDD, aplican sanciones por infracciones leves de hasta 40.000 €, en sanciones graves entre 40.001 € a 300.000 €, y las sanciones muy graves entre 300.001 € a 20.000.000 €.
Por ejemplo, evitar adoptar medidas de seguridad apropiadas o nombrar un delegado de protección de datos, en el RGPD se contemplan sanciones de hasta 10 millones de euros o el 2% del ingreso financiero del año anterior de la empresa. Si la falta es por vulnerar los derechos de los afectados o incumplimiento de principios básicos de tratamiento, la multa es de hasta 20 millones de euros.
El cumplimiento de la Normativa de Protección de Datos
Para evitar cometer infracciones y ser sancionado, toda actividad comercial o publicitaria que trate datos de carácter personal debe cumplir, según la normativa, recabando el consentimiento expreso de los interesados mediante la manifestación de voluntad libre, especifica, informada e inequívoca. Estos datos de las personas deben ser obtenidos de manera lícita y tratados de forma leal y transparente.
Los empresarios deben proteger la información personal de sus clientes o potenciales clientes, garantizando la seguridad de la información y privacidad. Dicha información no puede ser revelada a terceros sin autorización del titular, es decir, sin una base de legitimación que lo ampare. A la vez, estos últimos deben ser notificados sobre qué datos han sido recogidos, el responsable, la finalidad, legitimación cesiones y el ejercicio de derechos.
De acuerdo con los derechos que confiere la normativa, el interesado puede dirigirse a la Autoridad de Control competente para presentar la reclamación que considere oportuna. Así como también podrá ejercer los derechos de acceso, rectificación, limitación de tratamiento, supresión, portabilidad y oposición al tratamiento de sus datos de carácter personal, así como a la retirada del consentimiento prestado para el tratamiento de los mismos.